El film entrecruza tres historias, situadas en diferentes continentes, de mujeres implicadas en la lucha contra la epidemia del SIDA. En China, Jing Ping instala un banco de sangre móvil en un área rural remota; cuando la gente comienza a enfermarse, un joven granjero intenta descubrir la verdad. En Sudáfrica, un grupo de monjas intenta salvar tantas almas como sea posible, pero descubren que la dura realidad cotidiana genera múltiples problemas. Al mismo tiempo, en Canadá, un joven actor porno enfrenta una serie de sucesos que cambiarán su vida para siempre.